Añadir a la estética la funcionalidad y la emotividad unida a la utilización y a la posesión de un objeto son los ingredientes de los proyectos de Francesco Lucchese. De esta filosofía y de su creatividad nace Zero-Otto, un nuevo concepto de radiador de aluminio y decoración al mismo tiempo. Además de calentar, el radiador de aluminio Zero- Otto, en la versión individual, ofrece la posibilidad de perfumar el ambiente circunstante gracias a una caja de esencias que se integra formalmente con el radiador. En sintonía con nuestras emociones y estados de ánimo, es posible difundir en efecto en el ambiente la esencia deseada. Caracterizado por una forma sencilla y limpia, se presta para amueblar, además de calentar, ambientes contemporáneos. El radiador Zero-Otto está fabricado en aluminio y se puede instalar de forma individual o en vertical o en horizontal, en la versión doble.
Diseño
Francesco Lucchese
"Mirar el pasado para diseñar el presente con ideas que miran el futuro", esta es la filosofía proyectual de Francesco Lucchese que desarrolla los proyectos buscando una relación con la empresa para construir estrategias. Añadir a la estética la funcionalidad y la emotividad unida a la utilización y a la posesión de un objeto son los ingredientes de su forma de proyectar.
Todos los proyectos de Francesco Lucchese se realizan de forma que se conviertan en una experiencia; la actividad sensorial se vuelve primaria durante la utilización de un producto o recorriendo un acondicionamiento. La vista, los sonidos, el perfume y la percepción táctil son la investigación que permite dar fuerza al proyecto y a la comunicación de sus peculiaridades. La actividad de arquitecto se define a través de proyectos importantes tanto en Italia como en el extranjero, como un multisala y un hotel en Sofia, una sala de exposiciones en Shanghai y una en Brasil. Se ocupa de forma paralela de su actividad de docente en el Politécnico de Milán, el la Facultad de diseño, acompañándola con experiencias de enseñanza en el extranjero.
"Mirar el pasado para diseñar el presente con ideas que miran el futuro", esta es la filosofía proyectual de Francesco Lucchese que desarrolla los proyectos buscando una relación con la empresa para construir estrategias. Añadir a la estética la funcionalidad y la emotividad unida a la utilización y a la posesión de un objeto son los ingredientes de su forma de proyectar.
Todos los proyectos de Francesco Lucchese se realizan de forma que se conviertan en una experiencia; la actividad sensorial se vuelve primaria durante la utilización de un producto o recorriendo un acondicionamiento. La vista, los sonidos, el perfume y la percepción táctil son la investigación que permite dar fuerza al proyecto y a la comunicación de sus peculiaridades. La actividad de arquitecto se define a través de proyectos importantes tanto en Italia como en el extranjero, como un multisala y un hotel en Sofia, una sala de exposiciones en Shanghai y una en Brasil. Se ocupa de forma paralela de su actividad de docente en el Politécnico de Milán, el la Facultad de diseño, acompañándola con experiencias de enseñanza en el extranjero.